Guardianas del Barro es un retrato íntimo de Raquel, una artesana Pijao que, en su afán por preservar el legado de sus ancestros, enfrenta la devastación de su tierra en el resguardo El Tambo, en Natagaima, Tolima. Tras los incendios que consumieron los bosques y secaron el suelo, el barro, esencia de su arte, se ha vuelto esquivo. Junto a su prima María, quien también sufre la pérdida de las palmas necesarias para tejer sus esteras y canastos, ambas realizan un pagamento. A través de esta plegaria ancestral, buscan restaurar el equilibrio roto y preservar su identidad en medio de una crisis climática que amenaza con silenciar la memoria de su pueblo.