Durante la guerra interna en Guatemala, varias comunidades se refugiaron en la montaña para sobrevivir. En esos años de resistencia, crearon un sistema de salud en el cual combinaron medicina moderna con medicina ancestral. Hoy en día, la Comunidad Primavera del Ixcán, se sigue inspirando en ese aprendizaje organizativo sanitario frente a una ausencia total del Estado.